Antes que nada, os pido disculpas por mi silencio.
Llevo semanas y semanas intentando
escribiros el porqué de mi larga ausencia. He escrito decenas de textos que
luego han terminado en la papelera (la del ordenador, se entiende).
Y hoy, andando por la calle camino de
la farmacia lo he visto claro, os lo soltaré de sopetón:
“¡Se acabó!”
Así, tal cual. Como María Jiménez dice en
su canción.
Se acabó esta racha regular y semiagria
que me ha acompañado desde finales de mayo aproximadamente.
Se acabó el bajo ánimo y el desgaste de
energía hacia estupideces.
Se acabó mi relación con ÉL, se acabó
mi rotura de muñeca y se acabó el dar explicaciones.
No quiero aburriros ni intentando
explicaros por qué ha pasado todo esto ni intentando parchearlo con excusas
externas.
Mi fragilidad temporal, propia y humana
de mujer/persona, ha desplazado a Laska durante un tiempo. Pero mi alter ego es
mi fuerza y ambas nos retroalimentamos.
Así pues, vuelve Laska y vuelve con la
pimienta que la caracteriza.
¡Os he echado de menos!
Un beso.
La AFICIÓN espera impaciente tu prosa, diosa de la Red. Como persona sensible y entregada al amor y al arte de amar, te aceptamos el argumento del verano difícil y la racha más difícil, pero intenta no volver a dejarnos tanto tiempo sin tus vivencias y fantasías , pues a mi al menos me tienes enganchado.
ResponderEliminarBesos húmedos.
Virgilio
Gracias Virgilio. Tus palabras me alientan.
EliminarUn beso.
Hola Laska!... Veo que aquí tuviste algún que otro problema, no solamente físico, si no que , peor aún, con EL.. Seguiré impaciente a por el próximo relato...
ResponderEliminarUn beso
Jordi